Música, arte e historia reunidas en un clavicémbalo extraordinario: Musikeon, como parte de los cambios ligados a nuestra nueva sede de Barcelona, pone a la venta su histórico clave, una copia del Ruckers de Colmar de 1624 realizada por Saturnino Cisneros. A continuación, toda la información acerca de este instrumento que esperamos de corazón pueda tener un futuro a la altura de lo que ya ha vivido hasta el momento.
EL INSTRUMENTO
En 1994, Luca Chiantore encargó a Saturnino Cisneros, constructor de instrumentos de tecla formado en Holanda y entonces residente en Italia, la construcción de un clavicémbalo de dos teclados que, partiendo de las características del célebre instrumento de Ioannes [Hans] Ruckers II conservado en el Musée d’Unterlinden de la ciudad alsaciana de Colmar, imitara de aquel maravilloso ejemplar de 1624 no sólo la estructura sino también las características sonoras, en particular la peculiar diferencia de timbre entre los dos registros principales.
La construcción totalmente artesanal y enteramente en madera siguió los principios de la época, evitando los materiales plásticos, las colas sintéticas y los refuerzos metálicos frecuentemente usados para ahorrar costes y asegurar una construcción más rápida y más facilidades de transporte.
El resultado es un instrumento extraordinario que en sus 25 años de vida ha desplegado unas prestaciones sonoras y una estabilidad de afinación admirables. Está en excelentes condiciones, únicamente necesitado de los habituales ajustes de afinación y de un ligero lijado rutinario que agilice el desplazamiento del registro de 4’, como es habitual en instrumentos de estas características debido al propio paso del tiempo.
SU HISTORIA
Ningún libro en lengua española dedicado al piano ha llegado a igualar la fama y la difusión internacional de la Historia de la técnica pianística de Luca Chiantore, publicado por primera vez en 2001 y del que actualmente se distribuye la décima reimpresión, libro de lectura obligatoria en universidades y escuelas de música de 15 países de toda el área iberoamericana. Pues fue precisamente sobre este clave Ruckers-Cisneros de su propiedad como el propio Luca Chiantore fue experimentando y escribiendo, a lo largo de la década de 1990, las páginas de aquel ya icónico libro, actualmente distribuido en todo el mundo gracias a su traducción inglesa (Tone Moves: A History of Piano Technique).
Pero la historia de ese instrumento no acabó con la larga investigación que dio vida a aquel libro. Con los pasos de los años, el que iba a ser un instrumento de uso privado llegó a forma parte de los instrumentos que Luca Chiantore dejó en usufructo a Musikeon desde el momento de su fundación, en 2003.
Luca Chiantore ha organizado personalmente en Musikeon cursos de especialización, encuentros y masterclasses a los que han acudido a enriquecer su formación estudiantes y profesionales de la música de toda Iberoamérica y de diversos países de Europa. Ha sido así como figuras de la talla de Alicia de Larrocha, Lazar Berman, Leslie Howard, Dmitri Bashkirov, Joaquín Achúcarro, Uri Caine, Francesco Tristano o Eric Heidsieck fueron pasando por esas aulas y pudieron admirar este clave, mientras el propio Luca Chiantore y Musikeon como empresa mantenían un contacto profesional y personal con figuras esenciales de la música antigua como Jordi Savall, Montserrat Figueras, Rinaldo Alessandrini, Ton Koopman, Luca Guglielmi y Andreas Staier, que en más de un caso tocaron personalmente este instrumento.
SU DECORACIÓN
La gran joya de este clavicémbalo, incluso más allá de sus cualidades tímbricas y de su fascinante historia, es su decoración, obra de la pintora Carla Venturi. Esta decoradora italiana ha convertido este instrumento en una verdadera obra de arte, cuya belleza habla por sí sola.
Su decoración se inspira directamente en las escasas decoraciones supervivientes de los instrumentos de la familia Ruckers. Flores, plantas, pájaros de toca índole, insectos diversos e incluso crustáceos se combinan a lo largo de toda la tabla armónica: un verdadero viaje a en el tiempo, a Flandes en 1620, realizada con un gusto exquisito, un conocimiento extraordinario de las técnicas pictóricas de la época y un manejo insuperable del pincel.
Esta decoración es una verdadera hazaña artística, únicamente al alcance de una artista extraordinaria como es Carla Venturi y tiene por sí sola un valor que supera el del instrumento en sí mismo. La decoración se completa con una tapa pintada con los diseños y los lemas favoritos de la familia Ruckers. El teclado enteramente en maderas nobles está finamente tallado a mano.
CARACTERÍSTICAS Y REGISTROS
Medidas del instrumento: 225 cm x 90 cm x 29 cm
Base independiente de madera con tres patas.
Teclado superior: fa0-fa5 (F1-F6), 8’
Teclado inferior: fa0-fa5 (F1-F6), 8’ + 4’
Registro de laúd en el teclado superior mediante fieltros individuales.
Registro de 4’ accionado mediante palanca manual.
Acoplamiento mediante desplazamiento longitudinal del teclado superior.
Transpositor 415-440 Hz mediante desplazamiento lateral del teclado
Atril independiente en dos piezas.
Incluye llave de afinación y recambios de plectros y cuerdas (todas las medidas).
El instrumento está actualmente a la venta a un precio de 19.000 euros.
Se encuentra en Madrid, tras una completa revisión, en refuerzo de la estructura, el cambio completo del cordaje y la sustitución de las patas originales (que son las que aparecen en estas fotografías) por otras parecidas pero mucho más sólidas. Está afinado y está disponible inmediatamente.